Salimos sobre las ocho de la mañana desde el Rocódromo Municipal Paco Lledó, pasando por el barranco de Marchant y la costera del Catí. Almorzamos en el collado de la Vella y bajamos por la senda hasta Els Anouers. Caen algunas gotas, ya veníamos comentando que hoy nos mojaríamos, hemos venido provistos de paraguas y demás complementos para el agua.
Hoy, el hombre del tiempo no se ha equivocado, dijo que llovería a partir de las 12 y cosa rara que ha acertado. Nos ponemos las capas, los chubasqueros, abrimos los paraguas, y en cinco minutos llevamos los pies chorreando. Empiezan los resbalones, alguna que otra caída y como no, las incontenibles risas que acompañan a estos acontecimientos.
Cruzamos el Salt de la Yegua acompañados de un pequeño riachuelo y sus consiguientes charcos. El chaparrón ha durado 15 minutos, pero ha sido suficiente para recoger y canalizar el agua en este estrecho. Salimos al camino de Les Cordilleres cuando vuelve a caer otro chaparrón (ya estamos en el término municipal de Albatera), por las laderas de la sierra se formas varias cataratas de agua.
Llegamos al Parque de Montaña Virgen del Rosario y nos encontramos con los compañeros que están preparando la comida, cambio de ropa y sobretodo de calzado y a dar buena cuenta de la paella.
Un buen día de convivencia entre los socios y amigos del Club de Montaña Acclivis, y contentos porque por fin ha llovido, después de más de seis meses sin caer una gota.
Dar las gracias a los socios que se encargaron de preparar la comida, y a los más peques la enhorabuena porque aguantaron los 14 Km. de la marcha como unos jabatos.
Imágenes de la actividad:
(fotos Ángela)
(fotos Martín)
