Desde cuesta-arriba.es Raúl nos envia esta salida al pirineo catalán del mes de febrero:
Llegamos a la 1 de la madrugada al albergue de Espot, con el cielo completamente raso y sin apenas nieve por los alrededores. A la mañana siguiente cuando nos levantamos estaba nevando, con algo de viento racheado y el cielo tapado. Al poco rato paró de nevar y empezó a abrirse el día, la cosa empezaba a pintar bien. Después de desayunar y recoger todo, nos bajamos al pueblo para alquilar taxis 4×4 que suben hasta el Estany de Sant Maurici ya que el tiempo lo llevábamos algo justo y nos ahorramos casi 2 horas de pista monótona.
Al llegar al parking del parque, donde nos dejaron los taxis, comenzó a nevar y a moverse un viento racheado, con lo que enseguida nos tapamos hasta las orejas y empezamos a andar. La ruta que hicimos era desde el parking del parque del estany de sant maurici hasta el refugio Amitges, siguiendo todo el rato la pista forestal, sin pérdida posible.
Durante todo el recorrido el viento fue cambiando de calma total algunos ratos, a fuerte dependiendo de lo abierto de la zona. También tuvimos algún momento con algo de sol, que nos dejaron disfrutar de un paisaje precioso. Fuimos todo el camino disfrutando del cada vez mayor espesor de nieve, pletóricos de estar allí disfrutando de la montaña de una forma tan diferente a como estamos acostumbrados los valencianos. Durante casi todo el recorrido teníamos vistas de los picos de els Encantats 2748m. (símbolo del parque), la Roca del Estany 2509m. , el lago de San Mauricio en la primera parte del camino, los lagos de la Ratera y de la Cabana más arriba, y los picos del Portarró 2736m. y el Pui Pla 2829m. más adelante.
A primera hora de la tarde llegamos al refugio Amitges a 2380m. con la inconfundible aguja de Amitges 2662m. enfrente, donde ya reservamos hace un par de semanas, cuando surgió la idea. Aunque no fue una marcha larga ni dura pero estábamos cansados, el desnivel solo fue de unos 650m. pero el andar por nieve con bastante espesor sin raquetas es bastante cansado sin estar acostumbrado. Allí nos quitamos las pesadas mochilas, los gores, nos calentamos en la estufa y comimos tranquilamente.
El resto de la tarde lo pasamos por allí tranquilamente, algunos salieron un rato por los alrededores, otros salimos a hacer fotos y también hubo alguna que otra siesta. Después de la cena vimos que se despejo un poco y se veían las estrellas. Pese al frio y el viento salimos a hacer algún intento de foto nocturna. Recogimos y a las 10 en las literas.
A la mañana siguiente, tras el desayuno, recogimos los bártulos y devuelta. Al amanecer estaba algo nublado aun, pero se fue despejando conforme íbamos bajando por la pista que fuimos el día anterior. Y poco a poco se fue aclarando el día, dejándonos unas vistas del parque natural espectaculares que no pudimos apreciar el día anterior por la nevada, el viento y la niebla.
De vuelta, como íbamos con tiempo de sobra variamos un poco el recorrido cogiendo un PR que llevaba hasta el mismo estany de Sant Maurici pasando por la zona de la cascada de la Ratera, así variamos un poco el recorrido y vimos otra zona que no tiene desperdicio.
Después pasando junto al lago de san mauricio, y de nuevo con las vistas de els Encantats y todos los picos de la zona, llegamos a mediodía hasta el parking del parque donde ya nos esperaban los taxis 4×4 para bajar a Espot de nuevo. Comimos algo y emprendimos las 6 horas de vuelta a valencia.
Un fin de semana inolvidable, sobre todo por la compañía y el hacer algo tan diferente en unos parajes lejanos de casa tan nuevos y mágicos para nosotros. Sin duda habrá que repetir estas escapadas más a menudo, aunque es difícil que a todos nos venga bien ocupar todo el fin de semana y es una paliza de coche, vale la pena.
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