Nuestro primer contacto con los Alpes es subir a Montenvers 1913 m., a ver la Mer de Glace y la cueva de hielo para contemplar cómo va el retroceso del glaciar, llevamos más de 20 años haciendo fotos cada vez que venimos y la diferencia es abrumadora.
Subimos en el tren cremallera y, como miles de turistas que visitan estos parajes cada año hacemos el mismo recorrido. Como se aprecia en las fotos, la cueva van haciéndola de nuevo cada 2 años más o menos y las escaleras cada vez las alargan más. Bajamos del tren y subimos en el telecabina que nos baja unos cientos de metros para coger las escaleras y a patita volver a bajar otros tantos hasta la boca de entrada de la cueva.
Conforme bajamos vemos unas placas que han colocado por años para apreciar el deshielo del glaciar, es interesante, para los que visitan por primera vez una cueva de hielo el poder apreciar su intenso color azul, su dureza, como resbala, como quedan atrapadas en su interior las piedras, y el frio que hace.
A la vuelta, visitamos la Galerie des Cristaux, un pequeño pasadizo donde hay una exposición de minerales que han ido encontrando en varias zonas del macizo, fuimos a ver también el Templo de la Natura una especie de museo de fauna alpina y, “sorpresa”, ahora es un Glaciorium. Muy bonito y explicativo, como nacen y se forman los glaciares.
Bajamos por la senda a Chamonix 1042 m., pasando por el Buvette (bar) del Caillet 1621 m., y atravesando las vías del tren cremallera de Montenvers. Llegando a las pistas artificiales de trineo y parque de loisirs, así como al aparcamiento y a los coches.
Actividad realizada el día 14 de Agosto de 2012.